Ya transcurrieron 20 días del mes de enero y, a pesar de las promesas, el gobierno aún no convocó a los docentes para discutir salario.
Yendo al dato puro y duro, un docente entrerriano en un cargo testigo cobra de bolsillo menos de 7 mil pesos y las distorsiones en nuestro salario congelan su antigüedad por varios años.
La provincia sigue liquidando el Incentivo en negro, incumpliendo con la justicia, con la Constitución provincial, desfinanciando nuestras obras sociales, negando ese monto a los docentes jubilados e incumpliendo con el 82% móvil. Por otro lado, la compensación por traslado (el código 029) está congelada desde abril del año pasado, mientras que los combustibles incrementaron su precio más de un 18 % en ese mismo período.
Estos justos reclamos intentaron ser aplacados el año pasado por el gobierno provincial a través de la persecución, el descuento, la judicialización o las dilaciones en paritarias.
Los docentes nos mostramos fuertes y en la calle ante estos ataques.
Mientras algunos funcionarios depositan la suerte de la discusión salarial en un “ojalá y dios quiera”, los docentes (activos y jubilados) apelamos a la responsabilidad del gobierno y exigimos un aumento salarial digno, en blanco, sin distorsiones, acorde al precio de lo que cuesta vivir. De lo contrario, continuaremos la lucha por condiciones dignas de trabajo.
Aquello de que “los precios van por la escalera y los salarios por el ascensor” quedó en la historia, todos los trabajadores –no sólo los docentes– tenemos el salario congelado desde hace meses, frenado en un descanso de la escalera, mientras vemos día tras día cómo la canasta se sigue alejando de nosotros.
Exigimos apertura de la postergada discusión y una propuesta salarial digna. El inicio del ciclo lectivo 2016 depende de la voluntad política del gobierno por resolver esta situación.

Minoría “Rojo y Negro. 1º de mayo” en CDC de AGMER.
Adriana Dechat
Actas y Administración AGMER CDC
César Pibernus
Organización AGMER CDC
Alejandra Gervasoni
Jubilados AGMER CDC